Confundida con el paisaje de mi tierra.... con su vivacidad verde me suelen identificar. Viveza de esa juventud vigente llena de felicidad. Esa felicidad ansiada que nunca logro encontrar. Topé con ella un momento, para que luego volviese a volar.
Así veo mi vida fugaz, me ahogo entre un sin fin de recuerdos que al olvido, el mar se los ha de llevar.
Observo mi entorno y no veo más que la hierba salpicada por el rocío, los pinos y eucaliptos bailando al son del viento; el sol que tímido, aveces asoma entre el cielo algodonado, y el firmamento gris.... gris, como mi existir...
Ajena a todo, siento dentro de mi, la llama apagándose; el fuego de la pasión que me hizo arder, hoy se transforma en cenizas. Mi pasividad tan solo se turba con lo amargo de mi llanto, esas lágrimas llenas de sentimiento, que nadie ignora; pero todos callan....
Cierro los ojos, e imagino mi alma en libertad, buscando un lugar seguro en donde ya nadie la podrá dañar, aunque dañarla es ya imposible por lo que ha tenido que soportar, un sin fin de desengaños, que la empujan a vagar.
Mi corazón esta roto, mis sueños caídos, mi luz se ha apagado, mi inocencia se ha perdido, mis ilusiones han huido; y yo ilusa, vuelvo la vista atrás en busca del anhelo perdido, que me devuelva la sonrisa.
Tantos recuerdos, secretos, ensoñaciones; repartidos por mi habitación. Esa habitación oscura y vacía.... en soledad; soledad que me persigue incansable....
Soy como una marioneta, movida por la vida; vida que juega con mis ritmos y acaba con mi razón.
Grotesco paisaje el que me ronda, testigo inmóvil de ese secreto guardado, de mi fragilidad acallada, enmascarada por una tenue sonrisa.
Todo pasa por mi vida, y se vuelve a marchar,
yo de nuevo sola me quedo , en la penumbra de la que nunca debí salir.
Crucé el umbral de las emociones, volé rumbo a la libertad, besé el cielo, volví a caer, triste realidad de nuevo...
Olvidada de todo y de nada, paso ante la indiferencia del mundo, convirtiéndome de nuevo en polvo de la nada.....Vuelvo a mi oscuridad, me encierro de nuevo en mi, finjo el olvido, lloro en silencio, huyo de la vida, no quiero de nuevo sufrir. Me siento en mi ventana, miro al cielo, vuelvo a esperar.... Espero tiempos mejores que me devuelvan mi felicidad, que borren por un instante de mi mente, la horrible realidad. Vuelvo a caer al vacío...... Comienzo a llorar. Lloro entre mi silencio y mi amarga soledad. Sola nací..., sola camino..., sola iré al olvido....
La soledad es más amarga, cuando te rodea todo el mundo y añoras a quien ya no está. Ya no está, ya se ha marchado. Nunca olvidarás. Ya solo será un recuerdo, en eso se convertirá. He de guardar mi recuerdo. Mis recuerdos son lo único, que no me podrán quitar. Que difícil es guardar silencio, cuando tus entrañas quieren gritar.
Siento como se escapa la vida, en busca de la libertad, libertad ansiada, que me haga volar.
Me pierdo en el horizonte, divisando, el lugar más lejano hasta el que podría escapar.
Mi vida muerta, muerta en vida.... ya nada será igual.
No hay comentarios:
Publicar un comentario